Con sus curvas voluptuosas y su exaltada feminidad, Gaultier Divine muestra con orgullo el corsé, símbolo emblemático de la Maison. Reinterpretado una vez más, se convierte en una preciosa joya de brillo dorado y en un símbolo de poder. Este hechizante frasco encierra en su interior lo más preciado. Una feminidad incontenible acorde con su época.